El banco flotante y la mesa c3 complementan con elegancia y firmeza el concepto de la cocina como espacio vital.

 Seguramente, al leer estas líneas, estará usted sentado. No hay nada sorprendente en ello. Al fin y al cabo, es la posición más cómoda para leer. También lo es para pensar, comer o para que surjan buenas conversaciones. Y uno puede relajarse de maravilla, con la mente ensimismada, pero sin perderse lo que sucede a su alrededor. Esto demuestra que había razones más suficientes para que bulthaup prestara toda su atención al tema de sentarse.

El punto de partida de la reflexión fue la cocina tal como era a principios del siglo XX. Por aquel entonces constituía el acogedor centro del hogar. Era allí donde se comentaban o elaboraban los últimos rumores, donde se reía y se lloraba, donde se cocinaba…y donde se encontraban espontáneamente los invitados. Y la gente tenía la solución perfecta para acoger a todos los protagonistas de tan vibrante actividad: el banco.

El banco fomenta la comunicación. Este mueble horizontal corrido invita como ningún otro a tomar asiento. El espacio se distribuye en función de las necesidades, sin brazo que lo constriñan. Y si llegan unos cuantos invitados más, se aprietan todos un poco y ya está. El estímulo para la comunicación resulta evidente.

De esta misma forma ve bulthaup la cocina, como un espacio vital, un lugar donde se diluye la separación entre el cocinar y el vivir. Por ello, una consecuencia lógica era recuperar el banco, y hacerlo con el característico lenguaje formal de líneas claras y las posibilidades que sólo ofrece bulthaup b3. Ahora el banco realmente puede flotar. Liberado del suelo, el delicado mueble chapado obtiene una levedad visual que potencia el espacio que lo rodea reforzando sus ejes horizontales y aprovecha la estabilidad de la pared funcional. La sección de los materiales utilizados no supera los 16mm, y a pesar de ello es capaz de soportar grandes cargas.

El banco se sirve en distintos largos, tanto en su versión independiente como compuesta de varios elementos. Ello permite innumerables soluciones como, por ejemplo, el banco a lo largo de toda la pared, para poner de manifiesto que no se trata sólo de un sitio donde sentarse a comer, sino también de un lugar de comunicación.

En combinación con la mesa adecuada, cuyo lenguaje formal expresa asimismo el concepto bulthaup b3, la cocina como espacio vital es reinterpretada como punto de encuentro actual. Estable y rotunda, la mesa descansa sobre el suelo y resulta a la vez delicada, ligera e intemporal. También en sus tres medidas disponible, el grosor de la mesa nunca supera los 16mm.

A fin de cerrarla por el lado exterior, los diseñadores de bulthaup han concevido otro banco casi idéntico, de finas proporciones, pero apoyado en el suelo. El respaldo se alarga por debajo del asiento a fin de subrayar la elegancia del mueble. Varios de estos bancos apoyados en el suelo en su versión corta, de 108 centrímetros, colocados con pequeñas separaciones entre sí, resultan especialmente prácticos para mesas largas, ya que permiten que los comensales puedan levantarse sin impedimentos.

Roble, arce, peral de monte –todo es posible. Para los acabados, el cliente se le presenta el dilema de cuál elegir, dadas las numerosas variedades de madera que ofrece el programa, como el roble, el arce, el cerezo o los chapados especiales como en peral del monte. Así pues, los bancos y las meses se integran formal y estéticamente en bulthaup b3 y permiten también extender el sistema más allá de la cocina – a la zona de estar, a la entrada, al zaguán…