bulthaup b2 es probablemente la cocina más compacta de nuestro tiempo: reducida a tres elementos básicos –banco de trabajo, módulo taller y módulo electrodoméstico- se adapta fácilmente a las cambiantes circunstancias vitales de sus propietarios. Puede ampliarse, desmontarse y reconstruirse sin problemas en cualquier momento. Con sus formas claras y un diseño claramente funcional, crea un ambiente inconfundible y reinterpreta el espacio vital de la cocina: como taller de cocina.

bulthaup con la colaboración del estudio vienés  EOOS durante la concepción del taller de cocina bulthaup b2. Con su particular método de trabajo del “Análisis Poético”, que investiga imágenes arquetípicas, costumbres y rituales centenarios, ha creado una solución elemental, formalmente perfecta, extremadamente funcional e innovadora que a la vez retoma elementos consagrados.

Uno de ellos es el banco de trabajo bulthaup, lanzado al mercado en 1988 y que se ha convertido en un clásico de cocina. El nuevo banco de trabajo bulthaup b2, la isla independiente más compacta y hermosa, aúna como su predecesor todo lo necesario para la preparación, la cocción y el posterior disfrute de los alimentos: encimera, zona de aguas y de cocción, y no olvidemos, espacio para comer. La novedad es que la distribución de las distintas áreas funcionales no es estática, sino extraordinariamente flexible. Según la necesidad y el gusto personal, en el espacio entre las dos mordazas laterales los módulos individuales pueden combinarse como se desee: tanto en orden y en función como en materiales empleados. El perfil de conexión elástico desarrollado por bulthaup, que no sólo garantiza juntas totalmente estancas sino también un fácil montaje y desmontaje, permite disponer los distintos módulos en un orden arbitrario, ya sean encimeras de acero inoxidable, piedra natural o madera noble, zona de aguas, de cocción a gas o eléctrica o plancha teppanyaki. Gracias a esta técnica de construcción flexible, el banco de trabajo puede montarse en diferentes configuraciones y, en caso de necesidad, ampliarse o reducirse de tamaño. Las instalaciones de agua, gas y electricidad quedan revestidas mediante tubos flexibles de color aluminio. Las mordazas de sujeción laterales no tienen solamente una función estática, y en la junta funcional pueden colgarse recipientes para ingredientes y utensilios de cocina, que de este modo están siempre al alcance de la mano.

El banco de trabajo bulthaup b2, compacto, puro y sumamente funcional, se complementa con un mueble de acabado artesanal y formalmente perfecto: el módulo taller bulthaup b2. Una joya disponible en roble o nogal que puede colocarse adosado a la pared o, como una escultura, en el centro del espacio, y que además de su belleza exterior posee también sólidos “valores internos”. El módulo taller bulthaup b2 aúna de manera perfecta tradición y progreso. Con las puertas baúl abiertas, presenta al usuario todo su contenido: vasos, cazos, sartenes y otros utensilios se encuentran así al alcance de la mano. Se ha renunciado completamente al uso de cajones y, como en un armario de herramientas, todo se muestra en la primera fila. Esto no sólo permite un trabajo más eficiente y ergonómico, sino que además lleva a almacenar sólo lo mejor y lo más apreciado y a no desperdiciar espacio para lo superfluo. La  “vida interior” del módulo taller puede configurarse según las necesidades individuales. Para la vajilla más delicada, que no puede colocarse directamente sobre las rejillas de madera, hay bases de aluminio que pueden dotarse opcionalmente de enchufes. El espacio de almacenamiento en las puertas baúl puede completarse con barras, ganchos, recipientes, portarollos, contenedores universales, tarros de especias, soportes para cuchillos e incluso con un elegante soporte para un bloc de notas. Si necesita más espacio, puede integrarse adicionalmente una puerta marco de aluminio, que puede alojar p.ej. recipientes y contenedores universales.

También los electrodomésticos como frigorífico, horno o lavavajillas pueden integrarse en la cocina sin macular en lo más mínimo la pureza de bulthaup b2, siempre concentrada en lo esencial; desaparecen en el módulo electrodoméstico y, con la excepción del horno, desarrollan discretamente su trabajo a puerta cerrada. Un complemento práctico es el elemento para desperdicios sobre ruedas, que puede aparcarse debajo del banco de trabajo y desplazarse hasta el lugar donde se necesite. La carcasa de acero envuelve tres contenedores que permiten una cómoda separación de residuos. Un detalle tan bien pensado, tan funcional y flexible como los demás elementos de bulthaup b2.